Aprendiendo siempre: la tesis doctoral

Mis queridos poetas y piratas: 

Nos acercamos al día 1 de septiembre y, por tanto, un nuevo horizonte de aventuras se deja ya entrever. No puedo ocultar que estoy muy ilusionada, pero antes de contaros las novedades (lo haré cuando empiece el mes), quería introducirme poco a poco de nuevo por estos mares y, sobre todo, explicaros algunas cositas que tenía pendientes. Ahora justo miraba y el curso 2016/2017, que ya acaba oficialmente, ha sido un tanto extraño para nuestro rincón virtual. Por una parte no he podido actualizar apenas (lo siento de corazón), pero por otro nos concedieron el premio Espiral Edublogs y he terminado un 'proyecto' muy especial.

La ansiada peonza nos llegó y, cuando rozábamos agosto, finalizaba aquello que me ha tenido bastante alejada de estos lares (¡y de todo!) durante los últimos (bastantes) meses: la  tesis doctoral*.  Ha sido un proceso largo, difícil en muchas ocasiones, pero que, sin lugar a dudas, ha valido muchísimo la pena. Por este motivo quería compartir con vosotros mucho de lo que me ha aportado, especialmente como docente, aunque se podría extrapolar perfectamente al nivel personal:

► Me ha enseñado a investigar.  Aunque esto parezca sencillo (Google nos lo pone todo muy fácil tenemos a nuestro alcance muchísima información), en realidad no lo es.  Por ello, es esencial saber buscar en las fuentes correctas, conocer cómo seleccionar los datos y ordenarlos, localizar programas que te faciliten el análisis, etc. De hecho, esto lo aprendes por las buenas o al perder horas y horas volviendo a leer algo que ya habías descartado, por ejemplo.  

► Me ha permitido conocer y profundizar en lo que más me gusta: la enseñanza. En concreto, sobre el proceso de enseñanza-aprendizaje de la escritura (ya sabéis que me encanta). Esto me dado la oportunidad de descubrir investigaciones y prácticas educativas que llevan a cabo en todo el mundo. Poder leer sobre cómo trabajan (e investigan) la escritura los profesores en Australia, por poner un ejemplo, ha resultado impactante. Y, por cierto, me ha dado muchísimas ideas :)

► Ha hecho que me evalúe como docente, que ponga en entredicho cada una de mis prácticas, mis proyectos. En definitiva, la investigación te enseña a pasar por un filtro previo cualquier acción didáctica que te plantees poner en marcha. Te hace más crítico contigo mismo, y al mismo tiempo, te impulsa hacia querer siempre mejorar. 

► Me ha enseñado lo importante que es la automotivación. En mi opinión, es imprescindible en cualquier proceso de aprendizaje. De hecho, siempre que alguien me pide consejo sobre si empezar o no la tesis, le hablo de la motivación. Si la tienes, bien sea esta intrínseca o extrínseca, perfecto. 

Estas son solo algunas de las muchas cosas que he aprendido durante este proceso, simplemente quería compartirlas con vosotros dado que he tenido este rinconcito bastante parado por ello. Por otro lado, ya sabéis que para mí sois muy importantes y sois parte de esa automotivación de la que hablaba.

¡¡Seguimos!! 

* La tesis ha sido dirigida por la Dra. Teresa Ribas i Seix y el tribunal estuvo formado por los doctores Carmen Rodríguez, Llorenç Comajoan y Xavier Fontich. Muchísimas gracias de corazón a todos ellos y a todos los que habéis hecho posible este sueño.